La psicomotricidad fina se refiere a aquellos movimientos del cuerpo que requieren más destreza, precisión y habilidad que ningún otro tipo y que implican el dominio y control, especialmente de manos y brazos. El desarrollo de movimientos finos es lo que facilitará, más adelante, la grafomotricidad.
Ésta se puede trabajar por medio de actividades que se realizan como decimos con las manos y que requieren precisión y coordinación; y aunque los niños por lo general van adquiriendo esta habilidad con el crecimiento, practicar y realizar ciertos ejercicios ayuda a que sus habilidades sean más precisas, por eso es esencial trabajarla e impulsarla desde edades tempranas, eso permitirá a nuestros niños ir ganando control y precisión progresivamente haciéndoles más independientes y facilitándoles la adquisición de destrezas más complejas como la escritura.
Aquí os dejamos algunas de las actividades y propuestas que realizamos en el aula para intentar potenciar la motricidad fina, ninguna es compleja, ni requiere de materiales específicos con lo que también os puedan servir a modo de juego, para realizarlas en casa de forma sencilla.
Esperamos que os gusten.
¡Muchas gracias!.
Ensartamos macarrones en espaguetis:
Representamos elementos con plastilina :
Encajamos ojales en botones:
Enroscamos y desenroscamos tapones, haciendo series u ordenando números:
Insertamos con pinzas, bolitas en botellas:
¡Todas las actividades están genial!Gracias por las ideas.
Son geniales las ideas de aprendizaje que tenéis. Sin duda una forma muy divertida para trabajar la psicomotricidad!!