Esta semana por fin ha llegado el buen tiempo e incluso ha empezado a hacer un poquito de calor por ello la hora del recreo ha sido diferente. Hemos salido sin abrigo y los alumnos estaban contentísimos.
En el recreo jugamos, corremos, saltamos, descansamos y desconectamos del tiempo que pasamos en el espacio interior del aula. Es el momento favorito por los alumnos, y nos lo pasamos genial. La hora del patio puede brindar de forma natural la posibilidad de otro tipo de actividad motora que no se pueden trabajar en el interior del aula, y además se cubren de forma espontánea.
Es un espacio exterior importante en la escuela infantl, sirve como instrumento para la socialización y la individualización, entendiendo la socialización como un proceso por el cual el niño se incorpora al grupo social en que vive y presenta una doble dimensión: el niño recoge información que le permite adaptarse al contexrto, y a su vez emite determinadas formas de actuar con las que participa en el grupo en el que se desarrolla. La hora del patio es un momento en el que los niños aprenden a relacionarse de forma libre y espontánea con sus iguales, desarrollando la imaginación así como la motricidad.
Además de todo esto, es un tiempo en el que aprenden valores como el respeto y el compañerismo, donde inician sus primeros vínculos de amistad o dónde aprenden resolver aquellos conflictos que puedan surgir. En definitiva la hora del recreo es muy importante para el desarrollo tanto psicomotor como social de nuestros alumnos.