Hemos emprendido un proyecto nuevo que nos está gustando mucho, «el cuerpo humano». Como niños mayores de 4 años que somos, ya estamos aprendiendo cosas más específicas de nuestro cuerpo y nos están resultando realmente sorprendentes.
Hoy, una amiga de nuestra clase, nos ha traído un fonendoscopio para poder oír nuestros corazones. Antes de comenzar, hemos estado explicando cuál es la función de este aparato y a algunos les ha recordado cuando van al médico y el doctor se lo pone. También hemos hablado del ritmo de nuestro corazón: cuando corremos nos late muy rápido y cuando estamos tumbados late más lento.
Una vez aprendido todo ello, hemos comenzado a saltar uno por uno y después nos hemos puesto el fonendoscopio a nosotros mismos para escuchar los latidos y nuestras caras han sido realmente asombrosas.
¡Nos ha gustado mucho y hemos aprendido aún más!
Pero que guapa es mi chica. Lo mejor de todo la cara de felicidad que haceis que tenga, !GRACIAS¡
Muy divertido que puedan oír su propio corazón con el fonendoscopio.
Gracias papis por compartirlo con el resto de niños.