ACHUPÉ, ACHUPÉ, …

¡¡Sí, sí, sentaditooo  me quedé. Muy bien familias!!!!

Durante esta semana hemos comenzado a jugar al corro de la patata, algunos se notaba que sabían cómo hacerlo, otros se iniciaban en ello. Se han divertido mucho.

Al corro se puede jugar al aire libre, pero también en espacios cerrados cuando el tiempo no lo permite. Se trata de un juego tradicional que no resulta anticuado en ninguna época.

Los niños se divierten jugando al corro, pero también es un juego con muchos beneficios, ya que promueve el desarrollo psicomotriz, la elasticidad, estimula el lenguaje, la memoria. Pero lo más importante del corro es que fomenta la amistad y la unión entre los niños, preparándoles para unas relaciones sociales basadas en el respeto y la complicidad. Levantarse, agacharse, sentarse, constituye la base de este juego.

En esta edad comenzamos con el corro de la patata, el patio de mi casa,… a medida que van creciendo el juego se complica hasta poder jugar, a la gallinita ciega, la zapatilla por detrás (3 años), seguro que os trae muy buenos recuerdos.

Lo vais a pasar genial!!