¡Ya estamos de nuevo en el cole!¡Qué bien!
Comenzamos el nuevo curso con mucha ilusión porque…¡ya estamos en la clase de 4 años! ¡Qué mayores estamos y qué grandes nos hemos hecho estas vacaciones!
Todos teníamos muchas ganas de vernos, pues han sido muchos días de vacaciones y nos habíamos echado mucho de menos. Llegamos al colegio con una gran sonrisa y con muchas ganas de contarle a los amigos las cosas tan divertidas que hemos hecho este verano, los lugares tan bonitos que hemos visitado, la cantidad de helados que nos hemos comido, los grandes castillos que hemos hecho con la arena de la playa y las largas siestas que nos hemos echado. Por las historias que hemos ido contado cada uno, todos hemos pasado un verano muy divertido y nos ha encantado escucharnos unos a otros.
Pero…una vez que hemos terminado nuestra gran asamblea del verano, algún amigo se ha dado cuenta que nos faltaba alguien en clase, nuestra mascota y el Señor Estudioso. ¡Es verdad! Ellos no estaban en nuestra clase cuando hemos llegado y no sabemos si es que siguen de vacaciones o se han despistado y se han ido a nuestra clase de 3 años del año pasado.
Tras una semana de incertidumbre y de varias llamadas telefónicas a ambos….¡por fin han llegado al aula! Y tanto nuestro nuevo amigo Moli como el Señor Estudioso han aparecido con un montón de sorpresas y cuentos que nos han dejado llenos de curiosidad por seguir aprendiendo junto a ellos durante todo el curso.
¡Comienza un curso muy divertido y lleno de grandes aprendizajes de la mano de nuestros dos amigos!
Ayer cuando llegamos a clase por la tarde, nos encontramos todos los carteles de los signos de las letras tirados por el suelo, ¡que raro!, cuando fuimos a pegarlos en su sitio nos dimos cuenta.. ¡de que los personajes de Letrilandia habían desaparecido! ¿Qué había pasado? ¿Porqué habían desaparecido? ¿Habría sido el gigante de Letrilandia?
Intentado encontrar una explicación, nos dimos cuenta de que en la pizarra había dibujado un móvil, después de mucho pensar, decidimos buscar dentro de los móviles de nuestras profes, a ver si había alguna pista dentro y…¡efectivamente! El mismísimo Señor Estudioso había dejado un mensaje de voz en el móvil de nuestra profe Cristina que decía esto:
Fuimos corriendo hasta la sala de psicomotricidad para encontrar la siguiente pista, ¡qué miedo! ¿Y si el gigante de Letrilandia estaba allí escondido para darnos un susto?Menos mal que no fue así, y por suerte, encocontramos al Rey U y nuestra siguiente pista: un sobre con fotos de chupetes, biberones, pañales….¿Qué significaría esto? Cada uno aportamos nuestra idea hasta que entre todos decidimos que teníamos que ir a buscar en la clase de los bebés.
