Después de la siesta nos cuesta un poquito despejarnos del todo, ya que dormimos como grandes marmotas. Cuando nos levantamos, vamos como pequeños “zombies” hasta nuestra clase, vamos al baño, bebemos agua y después nos gusta escuchar un cuento.
Cada día leemos uno diferente porque nuestros peques traen unos cuentos preciosos al cole, y es un momento realmente agradablepara todos.
Para ellos leer, escuchar y contar cuentos es un momento muy importante y no hay día que no perdonen escuchar uno de ellos. ¡Seremos grandes lectores!