La hora de la comida es un buen momento para trabajar hábitos saludables en los niños, para que esto suceda se debe fomentar un clima tranquilo en el que la comida no se convierta en una pelea entre papas y niños. Es importante crear en los pequeños curiosidad por los sabores y texturas nuevas desde pequeñitos y la mejor forma de conseguirlo es incorporando variedades en su menu introduciendo pequeñas cantidades del alimento nuevo para generar curiosidad . La hora de la comida no debe convertirse nunca en una imposición por eso en el cole introducimos los nuevos alimentos con juegos, historias y las deseadas «caritas sonrientes»…los más atrevidos no tienen ningún reparo en atreverse a experimentar con la comida y poco a poco el resto del grupo se va animando a participar en la «gran fiesta de la comida».
Un claro ejemplo de esto es la introducción de la ensalada en nuestros peques, algunos incluso nunca la habian comido antes en casa, y ante la pregunta; «Quien quiere ensalada?», todos ponian una cara un poco rara y ahora son cada vez más las manos levantadas esperando a las hojas verdes, el tomate, el maiz y la zanahoria rayada….los colores vivos del verde de la lechuga, el rojo del tomate, el amarillo de maiz y el naranja de la zanahoria hace que los segundos platos se vuelvan aun mas atractivos.
Un aplauso para todos los que disfrutan con los nuevos alimentos y para aquellas familias que apuestan por una alimentacion saludable.
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